Santino Ortiz se mostró contento con el rendimiento mostrado en la última fecha, aunque la suciedad de la pista lo privó de conseguir el podio.
Con el auto que le entrega la Scudería Ramini, el lomense se pudo reponer luego de un par de fechas adversas y fue protagonista en cada salida a pista.
La falta de adherencia lo dejó con las manos vacías, pero mostró un buen potencial para ser protagonista en las fechas que restan.
“Después del mal paso por San Juan, volver a La Plata y girar y probar sin que se rompiera nada me dio mucha confianza. El auto funcionó muy bien, fue contundente en cada salida a pista y siempre pudimos estar entre los 10 primeros. En la serie terminamos 3° con un gran ritmo y en la final del sábado llegamos 7°”.
“Por la inversión de la grilla, el domingo largué 4°, rápidamente me coloqué 3° y sabía que iba a ser una carrera larga, por lo que decidí no arriesgar en esos primeros metros porque la pista estaba fea. En ese momento se produce un trompo delante mío, intento esquivar y no pude, por lo que terminé pegándole con la rueda delantera derecha y se rompió el auto”.
“Era una oportunidad de pelear por la carrera, lo habíamos demostrado en la serie y la final, por lo que nos volvimos amargados por ese lado, pero contento porque el auto está funcionando muy bien, tuvo una gran confiabilidad y me quedo con eso para esperar lo que viene”.